¿Qué es el Precursillo?
Es el primero de los tres tiempos del Método. En él se pone en marcha el proceso evangelizador, que en definitiva es la finalidad para la que existe el M.C.C.
¿Qué relación tiene el Precursillo con el Cursillo y el Poscursillo?
Los tres tiempos del método están estrechamente unidos
en un todo orgánico. El funcionamiento inadecuado de cualquiera de los tres tiempos, repercute inmediatamente en los otros dos y por tanto afecta al desarrollo de todo el Movimiento de Cursillos
de Cristiandad.
Por tanto, todos los dirigentes deben estar convencidos de que lo que se haga en el Precursillo, tiene que estar orientado al Cursillo y al Poscursillo.
Debe existir una gran unidad y coordinación entre el Precursillo y el Poscursillo, pues de hecho desde el Poscursillo se hace el Precursillo, pues el testimonio y la palabra de quienes hicieron el Cursillo animan a otros a hacer un nuevo Cursillo.
¿En qué consiste el estudio y selección de los ambientes?
El M.C.C. se sitúa como agente de la Pastoral ambiental. La Iglesia, tanto nacional como particular, tiene determinadas las prioridades de los planes de Pastoral.
Por tanto el primer paso debe ser el conocimiento de estas prioridades, que están contenidas en los Documentos Pontificios y en los de las Conferencias Episcopales, así como en el plan diocesano
de Pastoral, si lo hubiere.
Ante todo es necesario determinar qué grupos humanos influyen en el comportamiento de los integrantes de la comunidad y jerarquizar dichos grupos.
De los grupos determinados se elegirán aquellos en los que podamos trabajar, especialmente porque dispongamos de personas que tengan posibilidades reales de contacto con las personas del grupo o
grupos elegidos.
Una vez elegidos los grupos humanos, o ambientes en los que vamos a trabajar, es necesario estudiar las circunstancias ambientales, las realidades que rodean a los futuros candidatos, puesto que
el ser humano integral por convertirse, es el hombre o mujer insertos en su realidad.
Difícilmente podrá iluminarse la vida en la realidad de cada persona con la luz del Evangelio, si desconocemos cual es esa realidad.
¿Cómo buscar candidatos?
Una vez determinado el ambiente a trabajar, hay que
fijarse en aquellas personas que tienen tendencia a actuar positivamente, que son preocupadas por los demás, particular o comunitariamente.
Hay una definición que dice que al Cursillo pueden ir: "las personas de cualquier clase social, equilibradas, maduras, libres y responsables, que puedan recibir los Sacramentos, que sean capaces
de captar el mensaje evangélico y comprometerse, y de descubrir sus carismas y ponerlos al servicio de la comunidad.
Entre ellas, las más ideales para hacer el Cursillo son aquellas que puedan ser más eficaces en la futura fermentación evangélica del ambiente del que procede.
Por el contrario, no son ideales aquellas personas a quienes el Cursillo no les traería beneficios o soluciones, como son las que no están en condiciones psicológicas normales o las que viven en
circunstancias irregulares de vida que no puedan solucionarse.
Es muy interesante seleccionar varios candidatos del mismo ambiente para facilitar la formación de núcleos en el Poscursillo.
¿Qué cualidades debe tener el candidato ideal?
Ser personas con personalidad profunda, capacidad de decisión, capacidad de actuar con libertad y capacidad de amar.
Ser real o potencialmente líderes, que impacten por sus decisiones, muevan por sus opiniones y empujen por sus acciones.
Ser personas auténticamente insatisfechas y con inquietud social.
Ser personas con aptitud para vivir en y para la comunidad.
Ser solidarios, generosos, preocupados por otros y por el mundo.
¿Cuándo deberán programarse los Cursillos?
Por su importancia se transcribe el nº
229 de las Ideas Fundamentales.
El Secretariado estará en condiciones de programar la realización de los Cursillos, sólo cuando tenga número suficiente de personas - y preferentemente grupos de personas- que por estar
encuadradas en las descripciones hechas arriba, den fundadas esperanzas de que, trabajando con otros hombres de buena voluntad, puedan lograr la cristianización de los ambientes.
¿Quién debe presentar y preparar a los candidatos?
Los candidatos deberán ser presentados con preferencia
por un grupo o comunidad y cuando no sea posible por otra persona.
Lo ideal es que el candidato ya actuara vivamente en una comunidad, lo que facilitaría su integración en el Poscursillo.
Quien presente al candidato es quien debe prepararle y apoyarle, y con su testimonio de palabra y vida, despertarle una disposición hacia la búsqueda, hacia la amistad y hacia el cambio.
Los presentadores deben conocer la finalidad del Cursillo, los ambientes seleccionados como prioritarios para la evangelización y los criterios de los que pueden, los que deben y los que no
conviene que vayan al Cursillo.
Obviamente, debe conocer bien al candidato a través de un estrecho contacto personal con el mismo.
En el caso de que el presentador sea una persona, debe dar ejemplo con su actuación en un grupo o núcleo y que ayude durante un tiempo al candidato en su Poscursillo a incorporarse a un núcleo de
cristianos.
¿Cuáles son los objetivos de la preparación?
Son los siguientes:
¿Cómo ha de hacerse la preparación?
La preparación ha de hacerse:
¿Qué relación hay entre el Precursillo y la comunidad?
El Precursillo será siempre la actividad de una
comunidad orante. Por ello la oración, los sacrificios, los Sacramentos y la reflexión sobre la Palabra, marcarán todos los momentos del Cursillo, entre los que se encuentra el Precursillo.
Por eso la última palabra del Precursillo, como en los otros tiempos, es la de la fe y la de la esperanza en la presencia del Señor que está con nosotros.
La comunidad en oración sabe que ésta es su fuerza y que evangelizar no es un acto individual y aislado, sino profundamente eclesial.
Esta comunidad ha de programar responsablemente la acogida de los candidatos en el Poscursillo y su inserción o reinserción en los grupos o núcleos cristianos.
Esta página web ha sido creada con Jimdo. ¡Regístrate ahora gratis en https://es.jimdo.com!